La creciente falta de credibilidad de la prensa y de los medios de comunicación ha producido una caída de ventas hasta ahora irreversible, y ha puesto a los medios en una situación económica precaria. Para resolverla, han tomado las decisiones equivocadas desde el punto de vista empresarial, lo que ha incrementado el problema. Y en el camino, han dejado al personal de los medios en condiciones laborales verdaderamente penosas, y aún más sometidas ideológicamente. El actual sistema de distribución (por ejemplo: de revistas y periódicos), no ayuda.
Cuando se dice que la revista TVyNovelas vende más que el National Geographic (como era de esperarse debido a que pertenecen a dos tipos de literatura diversos, con alcances sociales y prestigio diferentes), se oculta que el TVyNovelas ha perdido más de dos terceras partes de su público de 1987 a la fecha. No recomiendo invertir en empresas y productos de medios, debido a las actuales tendencias de ventas; pero sobre todo porque las empresas de medios parecen empeñadas en no darle a la gente lo que la gente sí quiere comprar.
La televisión se programa para quien tiene capacidad de compra; esto es: para los adultos principalmente. Pero la mayor parte del público de la televisión mexicana, son niños menores de 7 años. Y esto genera graves problemas sociales. Como dice Michael Ende, el autor de La historia interminable (La historia sin fin): Un mundo que no es bueno para niños, tampoco es bueno para adultos.
Continuación del resumen de los 10 problemas más graves que enfrentan actualmente los medios de comunicación, y que explicaban la caída de ventas --ya pronunciada en 1997-- que ha terminado llevando a los medios a la crítica situación actual (2011).
Resumen de los 10 problemas más graves que enfrentan actualmente los medios de comunicación, y que explicaban la caída de ventas --ya pronunciada en 1997-- que ha terminado llevando a los medios a la crítica situación actual (2011).
Análisis de tres películas mexicanas que no alcanzaron gran éxito, pero que ponen en evidencia que el cine comercial mexicano puede resurgir…, si tan sólo se valorara y pagase mejor a los guionistas, si se contase con mayores recursos económicos, si tan sólo los distribuidores no metieran tanto la pata, y si la influencia del cine de arte no empantanase las mejores intenciones de los productores.
Al multiplicarse el número de canales de tv, se ha pulverizado el público (la audiencia), y esto ha dificultado grandemente la recuperación de los gastos de producción de cada una de las obras y de su transmisión. Esto ha puesto en peligro la supervivencia de muchas empresas, lo que las ha llevado a multiplicar los contenidos transgresores (llamativos porque atentan contra los valores, ideas y creencias del público mayoritario). A su vez, esto ha incidido negativamente en las estadísticas sociales, como las de criminalidad y las de embarazo juvenil. ¿Cómo resolver el problema? Colombia nos ofrece una solución modelo.
El artículo anterior a este fue respondido por 2 renombrados antropólogos, que declararon gozar de las obras populares, no a escondidas, sino abiertamente. Para ellos, por su formación, el prestigio no es sino un factor más; para la gente que pretende dedicarse seriamente al arte y la literatura, sin embargo, se trata de un factor fundamental, que afectará seriamente su prestigio profesional. El hecho de que también incluso los intelectuales empaticen con las obras populares, significa que hay una notable cohesión social en torno a los valores, ideas y creencias mayoritariamente aceptados.
Una revisión a lo que los intelectuales leen a escondidas, nos permite concluir que consumir solamente obras prestigiadas, "cultas", no es posible. No lo es porque las obras exaltadas en los últimos cien años, son generalmente sórdidas, deprimentes, amargas y desesperanzadoras. Y esto explica que la gente, incluso los intelectuales, prefieran leer otro tipo de obras.